Desde la llegada de Joaquín Caparrós, Suso ha tenido la oportunidad de jugar en los dos partidos que ha disputado el Sevilla, tanto frente al Deportivo Alavés como contra Osasuna.
Ha salido en la segundas partes, y lo cierto es que ha destacado por encima del resto, su calidad y su capacidad para filtrar pases, ha hecho que el equipo esté más cerca de ganar que de perder.
Hoy ha habido rueda de prensa en la que el gaditano ha atendido a los medios de comunicación. Una de las preguntas obligadas, era en relación al motivo por el que García Pimienta decidió no contar con él:
«Voy a tener el respeto que no ha tenido conmigo. No era un tema deportivo, sino personal, suyo y mío por una cosa que tuvimos. No quiero entrar en polémica porque no es el momento. Fue una charla en cuanto a entrenamiento».
En COPE Sevilla han aclarado completamente el asunto, contando que el problema tuvo lugar en un entrenamiento, en el que Suso y otros capitanes del equipo como por ejemplo Saúl Ñíguez, hablaron directamente con el técnico.
Mencionaron que los entrenamientos y el trabajo que estaban realizando en las sesiones de preparación, no cumplían el mínimo de exigencia que se necesita en la élite, y que si seguían haciéndolos de esa manera, no serían capaces de competir con otros equipos.
Esto no sentó nada bien al técnico y tampoco a su coach, persona que no ha tenido afinidad con la plantilla, por lo que el barcelonés tomó la decisión de no contar con Suso, un castigo por cuestionar su capacidad y que no fue capaz de tener con Saúl.
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La tensión era tal, según el entorno del futbolista, García Pimienta decidió meterlo en el partido frente al Fútbol Club Barcelona, en el que el Sevilla estaba siendo goleado, para que le grada se cebara con él.