Víctor Orta estará pasando unos días bastante difíciles con el teléfono encima y con la situación límite que vive el Sevilla FC en este mercado de fichajes.
El club necesita como el comer, un cambio en el plantel, un central y un mediocentro defensivo, pero mientras las salidas no se den, no podrán llegar nuevos jugadores. El Sevilla ahora mismo está atado de pies y manos.
Los otros equipos lo saben, son conscientes de que el Sevilla necesita dar salida a los descartes y eso lo intentan aprovechar.
Los clubes llaman al Sevilla, piden cesiones por los descartes y ofrecen el 30-35% de su sueldo sabiendo que el Sevilla FC podría aceptar.
La última es la de Januzaj, cuando el Sevilla lo tenía todo listo para que viajara, el Basaksehir parece que se no quiere realizar la cesión, seguramente esperando sacarlo más barato aún.
La situación es dramática en Nervión, según cuentan en ‘Diario de Sevilla’.