Mal haría la afición si se tomara esto como un pulso con el entrenador. Julen Lopetegui le dio por fin, no sólo la titularidad, sino un partido completo, a Munas Dabbur y el israelí, pasada ya la visita del Dudelange, sigue siendo una incógnita. No desentonó ni hizo un mal encuentro, incluso dejó detalles en algún movimiento, pero también dudas sobre si eleva el nivel con respecto a otros delanteros que tiene en nómina el Sevilla. Se desmarcó, fue a recibir el balón y a tocar en corto, se asoció bien con otros compañeros de ataque y dispuso de ocasiones de gol, pero no dio argumentos a los que defendían con uñas y dientes un puesto para él en el once titular para poder exigir que Lopetegui repita con Dabbur en un partido de Liga.
