Por ahora, la situación está más bien parada. El PSV ha tasado a su jugador en 40 millones de euros y a partir de ahí se centra en lograr billete para la Champions. No obstante, queda un mundo hasta el cierre del mercado. El director general deportivo ni mucho se ha olvidado de Bergwijn. Lo quiere en el Sevilla y está dispuesto a actuar con templanza a la espera de que las posturas se acerquen, como tantas veces ocurre en el fútbol. Bergwijn no está apretando a su club, pero sí tiene interés en la propuesta del Sevilla. Suso siempre ha sido y es del gusto de Monchi por su calidad y facilidad para dar pases, si bien por ahora no es el objetivo. La prioridad se llama Bergwijn.
