Pablo Sarabia rechazó la oportunidad de abandonar el Sevilla en el mercado de invierno. Un equipo de la Superliga china, el Dalian Yifang, le hizo una oferta mareante en los últimos días de mercado que mejoraba sustancialmente sus emolumentos actuales. El club, que pertenece a la empresa Wanda, puso sobre la mesa 39 millones netos para el futbolista, una cifra con la que convencer al centrocampista español y negociar con el Sevilla. Sarabia dijo no a la propuesta. La decisión fue trasladada al club, que siempre estuvo al corriente.