Por el momento, al menos de cara al exterior, José Castro mantiene su mano en el hombro en la gestión de Arias y Berizzo. Pero desde hace más de un mes huele a quemado en la cocina sevillista y nadie parece remediarlo. Esta noche juega el Sevilla en Anoeta ante la Real y luego, tras el parón navideño, el primer plato fuerte del año: el derbi ante el Real Betis. En los últimos tiempos, el Sevilla ha sido claro dominante de la peculiar contienda local. Si cambia el viento y el cuadro blanco cae derrotado, puede que la cabeza del Toto Berizzo ruede. Pero puede no será la única cabeza que caiga. El Sevilla comienza a sufrir la presión de los grandes…
