La afición del Sevilla no se va a quedar callada. No es su talante ni su idiosincrasia. Por ello, ante el espectáculo vivido en la Junta de Accionistas del pasado lunes, donde los hechos y las declaraciones de los protagonistas han dibujado una autopista con final en la venta del paquete mayoritario de las acciones del club a un capital extranjero, han decidido mostrar su disconformidad a la primera oportunidad. El partido ante el Krasnodar ha sido la percha oportuna para sacar a relucir que no se van a callar y que quieren hacerle saber a los futuros compradores que no serán recibidos con los brazos abiertos.
