Todo sabe tan agridulce…

Si los gestores del club no saben cuantificar la decepción, la cifra de espectadores en el último partido de la temporada puede ayudarlos: apenas 28.060 personas se dieron cita en la sobremesa para un Sevilla-Athletic que olía a bizcocho rancio y terminó teniendo la emoción de una victoria que minimizó las críticas a la gestión… Caparrós se va sin salir a hombros y con el castigo de haber sido el verdugo europeo del Athletic. Su aplaudido regreso al club no fructificó. Pablo Machín no cuajó; el Girona se fue a Segunda; el Athletic se quedó sin Europa; Caparrós perdió el halo de héroe del Sevilla… Y Ben Yedder pudo haber firmado su último servicio en Nervión.

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