Reconstruir o destruir el Sevilla FC

Hay dos formas de afrontar cualquier bache en la vida: relamiéndose las heridas y siendo protagonista de un victimismo inusitado o, por el contrario, levantándose. Sin más. El sevillismo es especialista en confundir muchas veces los términos autoexigencia y autodestrucción. Dos conceptos que pueden acabar estrechamente ligados si se malinterpretan. Somos hijos de un Sevilla FC fuerte. Saneado. Sólido. Asentado en Primera y que en la última década nos ha hecho más felices que a todos nuestros padres y abuelos juntos a lo largo y ancho de sus vidas. Miren si somos unos privilegiados, que, a día de hoy, discutimos acaloradamente por eliminaciones en Champions League y derrotas contra equipos que se han convertido en rivales directos, y que duplican, triplican o cuadruplican nuestro presupuesto.

Ver Noticia[ad id=»88331″]

Comparte por Whatsapp esta noticia

Deja un comentario