Sin nadie que asumiera riesgos, que al menos intentara trenzar jugadas decisivas, que hiciese por subir el ritmo de juego… era muy fácil destacar. Bastaba con no estar físicamente agotado o tener un poquito de amor propio. Y en ese sentido sólo se libran de la quema Ben Yedder, Quincy Promes, Sergi Gómez y, especialmente, Kjaer. El danés volvió a demostrar que tiene en la colocación su mejor virtud.
Sala de máquinas agotada,ayer era el partido propicio para haber hecho debutar a algunos de los nuevos más los Roque,Amadou y Cía.Sr.Machin,sea valiente sin miedos,gracias