La eliminatoria, cargada de alicientes por el nivel de los contendientes, no necesita de factores extradeportivos que eleven su temperatura, pero fuentes policiales consultadas por este periódico informan de la intención de un grupo de ultras sevillistas de desplazarse hasta Roma para un encuentro nada amistoso con los radicales de la Lazio, con filiaciones políticas radicalmente opuestas. La afición sevillista no le va a la zaga: ayer se formaron largas colas en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán para retirar las entradas para esa ida en Roma.