A este Sevilla parece ser que hay que infundirle un poco de respeto para que dé un paso adelante. Con algún matiz que corregir que pudo resultar grave (sobre todo por alargarse en el tiempo sin la respuesta oportuna), el equipo de Sampaoli firmó un partido bastante completo ante un rival que, pese a los resultados, suele exponer poco cuando visita Nervión. Apretó con agresividad al Atlético empujándolo hacia su campo, lo hizo correr tras el balón y logró desordenarlo -lo más difícil- con el triángulo formado por N’Zonzi, Nasri y Vietto, sobre todo estos dos por ser los que más frecuentaron el área de Oblak, aunque Steven fue el ejecutor de la jugada ganadora.
